
Las caídas son la principal causa de lesiones e ingresos hospitalario entre la población de personas de tercera edad.
Las personas mayores no solo son más propensas a caerse, sino que también son más susceptibles a lesiones relacionadas con caídas, como una fractura de cadera o un traumatismo cerebral. Comprender cómo reaccionar frente a una caída de un adulto mayor y por qué tienen un mayor riesgo de caerse puede ayudar a mantenerlos a salvo.
¿Por qué son más propensas a caerse?
Varios factores contribuyen al hecho de que las personas mayores caen con mayor frecuencia que las personas jóvenes.
Disminución de la aptitud física
Muchos adultos se vuelven menos activos a medida que envejecen, lo que exacerba los efectos físicos del envejecimiento. No realizar ejercicio con regularidad resulta en la reducción de la fuerza muscular, disminución de la masa ósea, pérdida del equilibrio y coordinación, y reducción de la flexibilidad.
Problemas de visión
Las enfermedades oculares relacionadas con la edad pueden aumentar el riesgo de una caída de un adulto mayor, puesto que se hace difícil detectar obstáculos como escalones, charcos y umbrales.
Medicamentos
Una amplia variedad de medicamentos puede aumentar el riesgo de caída de un adulto mayor. Los efectos secundarios como somnolencia, mareos y presión arterial baja pueden contribuir a un accidente. Los culpables más comunes son los sedantes, antidepresivos, antipsicóticos, opiáceos y algunos medicamentos cardiovasculares.
Enfermedades crónicas
Las condiciones de salud como la enfermedad de Parkinson, el Alzheimer y la Artritis causan debilidad en las extremidades, poca fuerza de agarre, trastornos del equilibrio y deterioro cognitivo. Además, la neuropatía periférica o daño de los nervios, puede causar entumecimiento en los pies.
Procedimientos quirúrgicos
Los reemplazos de cadera y otras cirugías pueden dejar a una persona de tercera edad débil, con dolor e incomodidad, y con menos movilidad que antes del procedimiento. Esto puede ser temporal mientras el paciente sana o un problema nuevo y duradero.
¿Cómo reaccionar frente a una caída de un adulto mayor?
Cuando sos testigo de una caída, es imperativo tener una respuesta adecuada, rápida y oportuna. De hecho, tomar acciones correctas en el momento podría salvar la vida de una persona mayor.
No muevas a alguien que ha caído
Debés resistir el impulso de mover a una persona que ha caído y comprender que no tenés que ayudarlos a levantarse de inmediato. Mover a una persona mayor puede empeorar la situación, especialmente cuando se desconoce el alcance de una posible lesión.
En su lugar, primero evalúa el estado físico de la persona, dejando que los resultados determinen las acciones subsiguientes.
Si la persona está inconsciente e insensible
Si el adulto mayor no responde y está inconsciente, es importante que llames a los números de emergencia de inmediato. Mientras llega la ayuda, mantené al individuo lo más quieto posible, revisá los signos vitales (respiración, pulso, coloración de la piel, dilatación de la pupila, entre otros), buscá signos de sangrado y lesiones evidentes (hinchazón, hematomas, extremidades inusualmente colocadas), aplicá primeros auxilios básicos y quedate a su lado hasta que llegue la ayuda médica.
Si la persona está consciente y alerta
Si la persona está activa y consciente, mantenela cómoda, relajada y lo más quieta posible. Preguntale si siente alguna molestia, dolor intenso, palpitaciones en la cabeza o mareo; buscá signos de sangrado y lesiones evidentes y dependiendo del grado de dolor y lesiones, aplicá primero auxilios y llamá a los números de emergencia.
Luego, si la lesión no es evidente, preguntale a la persona si se siente lo suficientemente bien como para levantarse del piso y ayudala a moverse con mucho cuidado. Es importante que luego descanse un instante antes de volver a caminar o realizar lo que estaba haciendo.
Good advice.
Thank you Lynn ♥